Más del 50% de la población mundial padece de dolores de espalda. Los suecos, tan acostumbrados a las sillas de Ikea, son uno de los pueblos que más sufren este problema. Y es que una cosa es vivir en el “estado del bienestar” y otra muy distinta “sentarse logrando bienestar”.
La llamada ciber-generación sueca parece que es de las más doloridas del planeta. “Los jóvenes suecos se sientan demasiado en la parte frontal de la silla para utilizar el ordenador, no caminan lo suficiente y apenas levantan la cabeza de la pantalla para estirarse un poco”, afirma Catarina Rolfsdotter-Jansson, una instructora de yoga que utiliza a diario un invento que promete revolucionar la forma de descansar: la cochoneta Shakti.
“Los jóvenes suecos se sientan demasiado en la parte frontal de la silla para utilizar el ordenador, no caminan lo suficiente y apenas levantan la cabeza de la pantalla para estirarse un poco”
Se trata de una esterilla de 70X40 cm recubierta con entre 4.000 y 8.000 pinchos de fakir, pero de goma. Una verdadera fiebre se ha adueñado de los suecos desde que hace unos meses la estera Shakti saliera al mercado. Al parecer, no sólo deja la espalda nueva, sino que también acaba con el insomnio, las migrañas y el asma, mientras que los más integristas del concepto piensan que puede curarlo todo, desde la esquizofrenia a la caspa.
La alfombrilla Shakti
La esterilla CuraComp
Esta “alfombrilla de acupresión”, como realmente se la conoce desde tiempos inmemoriales por los yoguis hindús, no hace milagros, pero sus efectos sí pueden tener una explicación científica. La presión de las puntas hace que los capilares de la piel se dilaten aumentando la circulación de la sangre. Un incremento del flujo sanguíneo en los tejidos proporciona un incremento en la composición del oxígeno en los músculos y ayuda a mejorar la limpieza de toxinas de los mismos. El tratamiento probablemente también libera hormonas como endorfinas y oxitocina.
Max Hoffmann, quien hace poco renunció a un puesto ejecutivo en Ikea para convertirse en director de márketing de las esteras Shakti, asegura que se están haciendo pruebas clínicas con voluntarios para ver lo que sucede en el cuerpo en nombre de la diosa hindú de la fertilidad, que es cómo han bautizado a su alfombrilla. Estén atentos que cuando los suecos se ponen a vender complementos de hogar no hay quién los gane.
Tal es la fiebre nórdica por la Shakti (y por su principal competidor, la CuraComp) que el pasado agosto más de 3.000 usuarios se juntaron en un parque de Estocolmo colocando sus esteras en forma de los rayos del sol, logrando el record Guinness de la especialidad. Allí cantaron mantras, se relajaron y, al final, muchos de ellos se quedaron dormidos a la fresca, para demostrar la eficacia de un invento milenario redescubierto y que se venderá estas navidades a un precio a partir de 60 euros.
record Guinness de la especialidad Aprender a programar con ejemplos
¿Por qué no atacar los problemas de espalda directamente desde la silla, en vez de dormitar incómodo sobre un erizo de goma a la intemperie? Posiblemente porque las sillas ergonómicas están demodé. O no. Desde principios de este año se comercializa la segunda versión de la famosa silla “Aeron” de Herman Miller, una silla que más que ergonómica se cataloga como de “alta tecnología”.
demodé
Dice el decálogo de un vendedor de Ofiprix que las sillas “Aeron“ son a las sillas de oficina lo que un Ferrari Enzo a los coches. La “Aeron” se anticipó brillantemente a la era digital, permitiendo a los adictos al trabajo pasar horas y más horas atados a sus pantallas de ordenador, sin desarrollar dolores lumbares.
Con un sistema de suspensión que se ajustaba a la forma del cuerpo del usuario, la silla se convirtió en una asiento icónico convertido en must de las oficinas de Silicon Valley desde su debut hace 14 años. Su creador, Bill Stumpf, volvió a la mesa de dibujo en 2002 y elaboró un prototipo de Aeron 2.0 antes de su muerte en 2006. Un total de seis años (y unos cuantos millones de dólares) más tarde, Herman Miller comenzó a vender la “Embody” a principios de este año, por un precio de 1.400 € la unidad.
must
La “Embody” es un asiento de cuatro capas con una malla de cobertura. La primera capa corresponde a las bandas elásticas de la Aeron que proporcionaban la suspensión universal; una segunda corresponde a una capa de espirales de plástico que proporciona apoyo adicional, y una tercera capa de hexágonos de plástico que se mueven de forma independiente permiten masajear suavemente la espalda del usuario.
Por último, una malla de tela logra la circulación de aire entre todas las capas, manteniendo fresca la camisa, mientras que siete controles de palanca permiten ajustar aspectos como el soporte lumbar o la profundidad del asiento.
Viendo su innovador diseño, poniendo este “nuevo trono techie“ a un precio ligeramente más asequible sería todo un éxito entre la comunidad geek; y la colchoneta Shakti se vería sin duda relegada a la entrada de la oficina, para servir de felpudo a las visitas.
techie
Ponga una shakti en su espalda; aunque quién pillara una embody...
Más del 50% de la población mundial padece de dolores de espalda. Los suecos, tan acostumbrados a las sillas de Ikea, son uno de los pueblos que más sufren
comodibujar
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2024-12-10
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