Aunque algunos señalen como únicos culpables del deterioro del medio ambiente a los miles de millones de automóviles que circulan por el mundo, hay otros elementos que también dañan gravemente a la capa de ozono. Sin ir más lejos, las vacas. Los apestosos gases que emite su organismo no hacen ningún bien a nuestro entorno. Para concienciarnos y equiparar la contaminación producida por estos animales y la polución de los coches, la diseñadora Yi Wen Tseng se ha propuesto crear un coche impulsado por el nocivo aparato digestivo de estos rumiantes.
Así es como ha surgido el proyecto del Digestive Car (el ‘coche digestivo‘, en castellano). Se trata de un vehículo con el que esta artista crítica taiwanesa pretende concienciarnos, no solo de la tremenda polución que genera el medio de transporte más utilizado hoy en día, sino también del daño que causamos criando animales como las vacas. Porque, antes de alimentarnos de su sabrosa carne, se calcula que el ganado han emitido el 18% de los gases nocivos que provocan el efecto invernadero. Ahí es nada.
Es por ello que Tseng se ha propuesto buscar la forma de eliminar uno de estos dos focos de contaminación. Y como el sistema digestivo de las vacas es más natural, ha decidido diseñar un automóvil que, en lugar de por un motor tradicional, está impulsado por cuatro estómagos de vaca creados gracias a la bioingeniería. A través de la impresión 3D, esta diseñadora ha reproducido diferentes partes del sistema digestivo de estos animales para convertir el metano que ellos generan en energía, de forma que sirva para poner en marcha este peculiar coche.
Una vez al volante, bastará con accionar el mecanismo que elimina el gas acumulado tras la ingesta de hierba para que el vehículo se ponga en marcha. “Los órganos tienen sus propias funciones, como un proceso mecánico”, apunta Tseng. Para que todo funcione a la perfección, ha recreado las cuatro partes de los sistemas digestivo de los rumiantes: el rumen, el retículo, el omaso y el abomaso.
Por supuesto, una vez que el alimento ha sido digerido por estos estómagos artificiales, también se generan ciertos residuos. Así, el tubo de escape en lugar de emitir humo, expulsaría todo lo que no ha utilizado el aparato digestivo para producir la energía necesaria para empujar el automóvil transformado en estiércol. Así, si no teníamos suficiente con recoger las cacas de nuestros perros cuando los llevamos a pasear, también habría que soportar las heces de estos coches digestivos.
Así, aunque se trata de un proyecto que busca remover las conciencias y mostrarnos el deterioro al que estamos condenando al medio ambiente, la diseñadora taiwanesa ya ha hecho los cálculos para saber la cantidad de hierba que sería necesaria para poner en marcha el Digestive Car. En caso de que algún día pilotásemos este tipo de vehículos, como bien apunta Tseng, no solo necesitaríamos tener un planeta más verde, sino que también podríamos obtenerlo al tener mucho más abono con el que nutrirlo.
La diseñadora Yi-Wen Tseng no tiene la más mínima duda de que, a medida que avance la tecnología de impresión en 3D y podamos recrear los organismos vivos fuera de los seres que los poseen, los emplearemos como motor de los vehículos que a día de hoy utilizamos.
No obstante, este ingenioso y arriesgado automovil a pedos no es el primer medio de transporte pergeñado por el ser humano que utiliza los desechos que produce su organismo o el de algunos animales. Ya son legendarias la Tuk Tuk y la Toilet Bike Neo, motos cuyo combustible es la caca de animales y de humanos, respectivamente. Eso sí, más allá de si algún día llega a ser realidad el Digestive Car, en lo que sí apoyaremos a su creadora es en aquello de que los pedos más vale que estén fuera del coche que dentro. Pintura para suelos
la Tuk Tuk y la Toilet Bike Neo
Con información de Yi-Wen Tseng, FastCo Design, Protein, DeZeen y Psfk. Las imágenes de este artículo son propiedad de Yi Wen Tseng
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Las imágenes de este artículo son propiedad de Yi Wen Tseng
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Este coche va a pedos (porque su motor es un estómago de vaca)
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comodibujar
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2024-12-27
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