Cuando vemos una película, quizá no reparamos en la cantidad de sonidos que llegan a nosotros y que hacen más completa aún la experiencia cinematográfica: diálogos, música y todos esos efectos – desde pisadas hasta hojas movidas por el viento – que aportan realismo a lo que vemos en pantalla.
Ese trabajo de recrear los sonidos necesarios lo realizan los ‘foleys’, los artesanos de los efectos cinematográficos, que no necesitan de un ‘software’ muy complicado para crearlos. Aquí traemos algunos ejemplos cinematográficos de efectos que parecen una cosa y, en realidad, eran otra bien distinta:
Sandía para ‘Psicosis’
¿De qué hablamos? En la mítica escena de la ducha, un cuchillo se clava sobre el cuerpo de Marion Crane (Janet Leigh). Y suena, vaya que si suena.
¿Qué era en realidad? El cuchillo no se clavó sobre ningún cuerpo humano, sino sobre una sandía, con la que se logró un sonido lo suficientemente aterrador. No es lo único falso en esa escena: la sangre era jarabe de chocolate.
Ruidos de todo tipo para los animales
¿De qué hablamos? De los sonidos nada guturales de las criaturas protagonistas de ‘Parque Jurásico’
¿Qué era en realidad? Una mezcla de ballenas, burros e incluso tortugas copulando, tal y como reconoció el propio diseñador de sonido.
tal y como reconoció el propio diseñador de sonido
Elefantes y coches, ruidoso combo
¿De qué hablamos? Del sonido de los motores de los TIE Fighter en ‘La guerra de las galaxias’.
¿Qué era en realidad? Una mezcla de una manada de elefantes junto al sonido que produce un coche al ser conducido sobre pavimento mojado. Nunca una mezcla tan mundana dio lugar a un sonido tan intergaláctico.
Decirle “¡No puedes pasar!” a un bloque de hormigón
¿De qué hablamos? De Balrog, ese bicho al que Gandalf se enfrenta en ‘El señor de los anillos: La comunidad del anillo’.
¿Qué era en realidad? Un bloque de hormigón arrastrado a distintas velocidades sobre un suelo de madera.
Claro que Chewbacca era un animal
¿De qué hablamos? De la voz del mejor y más peludo amigo de Harrison Ford en ‘La guerra de las galaxias’.
¿Qué era en realidad? Una mezcla de animales: morsas, camellos, tejones sirvieron para cincelar a uno de los seres más míticos y queridos de la saga.
Comida de perro para un robot
¿De qué hablamos? Del robot T-100 en ‘Terminator 2’, que era capaz de deslizarse por debajo de las puertas convirtiéndose en materia líquida y haciendo un sonido muy particular.
¿Qué era en realidad? Comida de perro cayendo lentamente de la lata que la conservaba.
Una bola con motor
¿De qué hablamos? Del sonido que hace la bola gigante que persigue a Harrison Ford en la primera y famosa secuencia de ‘Indiana Jones en busca del arca perdida’.
¿Qué era en realidad? A pesar de que el diseñador del sonido probó con piedras que caían, encontró el sonido ideal en la carretera, mientras conducía: el del motor de un Honda Civic.
Globos para monstruos
¿De qué hablamos? De los M.U.T.O. que aparecen en el ‘remake’ de ‘Godzilla’ de 2014. Sus sonidos eran bastante inquietantes.
¿Qué era en realidad? Nada más y nada menos que una mezcla que incluía una mano pasando sobre un globo y un zapato de goma sobre la piel de un tambor. Súmale los sonidos de un potrillo y ya tienes el paquete completo. Todo sobre el cafe
Homenaje a monstruos clásicos
¿De qué hablamos? Del sonido que hace el monstruoso tiburón al final de la película homónima dirigida por Spielberg.
¿Qué era en realidad? Un homenaje al sonido que hacía el bicho de ‘La criatura de la laguna negra’, una vieja película de ciencia ficción estrenada en los años 50. Spielberg decidió usar el mismo chillido, que ya había utilizado para la caída de un camión por un barranco en ‘Duel’.
‘La criatura de la laguna negra’
Lametón a la mantequilla de cacahuete
¿De qué hablamos? Terminamos con una película ya clásica del mundo de la animación, ‘Toy Story’. En concreto, con la escena en la que el caballo Perdigón lame la cara de Woody, con su correspondiente sonido.
¿Qué era en realidad? El ‘foley’ decidió grabar el sonido por su cuenta y riesgo. Se untó mantequilla de cacahuete en la cara y contó con la inestimable colaboración de una vaca que lo lamió. En este caso, el sonido de la película sí que corresponde (más o menos) con la realidad. Todo por el realismo cinematográfico.
Con información de El Huffington Post, Cooking Ideas, Oveja Negra, wiki de ‘La guerra de las galaxias’, io9 y BBC. Imagen principal de Shutterstock
wiki de ‘La guerra de las galaxias’
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Cuando vemos una película, quizá no reparamos en la cantidad de sonidos que llegan a nosotros y que hacen más completa aún la experiencia cinematográfica:
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2024-11-23
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