Puccini, Mozart y el español Pablo de Sarasate han estado en las últimas ediciones. Ellos nunca lo habrían imaginado en vida, pero sus obras han servido para que alguien gane uno de los campeonatos mundiales más insólitos que existen: el de silbidos.
Una vez al año, silbadores de todo el mundo se animan a participar en una sorprendente competición con más de 40 años de vida. En unos días intensos, virtuosos de la anatomía bucal interpretan temas de todo tipo con el objetivo de alzarse con la corona del mejor silbador del planeta.
Todo empezó en 1973, cuando se creó en el pequeño pueblo estadounidense de Louisburg un festival ‘folk’. Uno de los participantes pidió interpretar una canción silbando y fue entonces cuando la mecha del silbido comenzó a arder en este pequeño rincón del estado de Carolina del Norte.
El éxito de esa primera interpretación se transformó en un par de años en un certamen propio y exitoso: había nacido el festival internacional de silbidos. Ese fue solo el comienzo, claro. Con el tiempo llegarían participantes de diversos países. Canadá, Gran Bretaña e incluso Japón son algunas de las naciones que han contado con representantes en la contienda de silbadores.
España también ha estado presente, claro. En la edición de 2013, José Julio Apesteguía participó en el Campeonato Mundial de Silbidos (Convención Internacional de Silbadores es la traducción exacta del nombre de la competición). Aunque no consiguió alzarse con ninguno de los premios por los que se lucha durante dos intensos días, Apesteguía estuvo más cerca de alcanzar su sueño, que no es otro que poder vivir de su asombrosa habilidad para silbar.
José Julio Apesteguía participó en el Campeonato Mundial de Silbidos
El sueño de este navarro – que ha llegado a sufrir lesiones musculares por las horas de ensayo acumuladas – sí que ha sido alcanzado por otros participantes de este peculiar campeonato. Por ejemplo, el británico David Morris, campeón de la edición celebrada en el año 2003 vende su música en formato CD y también en iTunes. Y no solo eso, sino que también ha participado en anuncios de televisión como este:
la edición celebrada en el año 2003
La última edición del campeonato, en la que cumplía 41 años, tuvo lugar el pasado mes de abril, en Tokio, y es que, aunque la inmensa mayoría de las veces la competición se ha realizado en el pequeño pueblo de Louisburg, su éxito ha hecho que en un par de ocasiones haya traspasado fronteras para celebrarse en Asia (en Japón y en China).
Si te interesa participar en la edición de 2015, ve tomando nota. No solo de los consejos que da la propia organización (nada especial; cosas como elegir bien qué canción vas a interpretar y que practiques hasta la saciedad), sino también de las distintas categorías en las que puedes competir.
los consejos que da la propia organización Skins de Fortnite
Aquellos silbadores que deseen tomar parte pueden hacerlo en tres modalidades distintas: clásica, popular y “artes relacionadas”. En la primera de ellas toca versionar a los compositores que hicieron historia siglos atrás. Por ejemplo, ¿qué tal algo de Bizet?
En la segunda categoría vale un poco de todo. Desde música tradicional de algún punto del planeta hasta cosas más actuales, como el tema principal de la última película de James Bond:
En la tercera categoría se valora a aquellos artistas del labio que, además, mezclen los silbidos de su actuación con otras artes. Por ejemplo, puedes silbar mientras tú mismo tocas con la guitarra la canción que silbas, o marcarte una ‘performance’ como la de este participante, al que no le falta detalle:
El jurado valora la técnica, la presentación en el escenario y también la actuación y se otorgan cuatro premios: uno por categoría y un cuarto al ‘Gran Campeón’, el silbador que participe con más éxito en las categorías de música clásica y popular.
valora la técnica, la presentación en el escenario y también la actuación
Tras 41 ediciones de este campeonato mundial, que cuenta incluso con un documental propio, han sido muchos los premiados, pero nosotros nos quedamos con nuestro representante a la espera de que otro compatriota se anime a cruzar mares para representar a España con resultados aún mejores. Mientras tanto, que nuestro amigo navarro nos haga bailar:
cuenta incluso con un documental propio
Con información de International Whistler Convention, José Julio Apesteguía y The Washington Post
Con información de International Whistler Convention, José Julio Apesteguía y The Washington Post
International Whistler Convention
El caso es mover el esqueleto:
- El piano que se escucha con la piel
El piano que se escucha con la piel
- Afina tu voz: llegan los ‘selfies musicales’
Afina tu voz: llegan los ‘selfies musicales’
- Casper Electronics, el artista capaz de convertir juguetes viejos en instrumentos para Danny Elfman
Casper Electronics, el artista capaz de convertir juguetes viejos en instrumentos para Danny Elfman
- 21 portadas de discos de la era comunista que hubieran llevado a sus autores al Gulag
21 portadas de discos de la era comunista que hubieran llevado a sus autores al Gulag
El mundial de silbidos está a la vuElta de la esquina: ¿te lo vas a perder?
Puccini, Mozart y el español Pablo de Sarasate han estado en las últimas ediciones. Ellos nunca lo habrían imaginado en vida, pero sus obras han servido par
comodibujar
es
https://imagenestop.net/static/images/comodibujar-el-mundial-de-silbidos-esta-a-la-vuelta-de-la-esquina-te-lo-vas-a-perderja-16351-0.jpg
2025-01-12







Si crees que alguno de los contenidos (texto, imagenes o multimedia) en esta página infringe tus derechos relativos a propiedad intelectual, marcas registradas o cualquier otro de tus derechos, por favor ponte en contacto con nosotros en el mail [email protected] y retiraremos este contenido inmediatamente