Lista completa de las nuevas normas de viaje para británicos que se dirigen a Europa en las vacaciones de octubre

Los residentes de Albufeira, en Portugal, están cansados del caos causado por los turistas. En un intento por controlar las multitudes y evitar que el comportamiento se descontrole, las autoridades locales han emitido un código de conducta para mantener la calma en el popular resort. Quienes sean sorprendidos infringiéndolo se enfrentan a fuertes multas.

Las multas oscilan entre un mínimo de 150 € y 1.800 € por ignorar las restricciones, que incluyen dejar carritos de compra fuera de lugar, encender barbacoas en la playa y crear ruido excesivo.

Las multas que se introducen en Albufeira incluyen:

- Usar traje de baño fuera de las áreas autorizadas – 300 € a 1.500 €

- Beber en la calle, orinar o defecar en público – 300 € a 1.500 €

- Desnudez pública o actos sexuales en público – 500 € a 1.800 €

Otros destinos han introducido normas similares. Alicante ha implementado nuevos toques de queda para bares y discotecas, tras un aumento en las quejas por ruido de los residentes. Las restricciones exigen que los bares cierren a las 12:30 a.m. entre semana y a la 1 a.m. los viernes, sábados y vísperas de festivos nacionales. Las discotecas deben cerrar a la 1 a.m. entre semana y a las 3 a.m. los fines de semana.

Son malas noticias para aquellos a quienes no les gusta nada más que relajarse con una copa de vino blanco fresco y encender un cigarrillo bajo el cálido sol continental.

Francia prohibió fumar en playas, parques, fuera de las escuelas y en otros lugares desde julio. La prohibición, que sigue medidas similares en una Europa cada vez más contraria al tabaquismo, eximirá a las terrazas exteriores de los cafés y no se aplicará a los cigarrillos electrónicos.

Una ley similar se está abriendo paso en el gobierno central de España, pero aún no está en vigor. Sin embargo, algunas regiones españolas tienen leyes locales que prohíben fumar en las playas. En Suecia es ilegal fumar en terrazas de restaurantes al aire libre, paradas de autobús, andenes de tren y patios de escuelas desde 2019.

El número de destinos que cobran impuestos diarios o nocturnos a los turistas está aumentando a un ritmo acelerado.

En el Reino Unido, un pequeño número de ciudades ha iniciado la práctica. Mánchester y Liverpool actualmente tienen tasas para visitantes, recaudadas de los hoteles a través de los Distritos de Mejora Comercial de Alojamiento. Edimburgo tiene previsto introducir una tasa para visitantes en 2026.

El número de destinos europeos con nuevos impuestos es demasiado numeroso para listarlo. Algunos de los principales incluyen Venecia, que ha introducido una tarifa de 5 € para excursiones de un día en un esfuerzo por limitar el turismo de un día.

En Cataluña, España, el gobierno ha retrasado una subida planificada del impuesto turístico diario, originalmente establecido entre 6 € y 11 €. El nuevo impuesto podría eventualmente subir a 15 € por día. Barcelona, el destino más popular de la región, ha aumentado su impuesto turístico municipal a 6,75 € por noche para huéspedes que se alojen en hoteles de cinco estrellas.

Varios destinos prominentes en toda Europa han introducido límites en el número de cruceros que atracan allí, para que los residentes y negocios no se vean desbordados por las llegadas.

Ejemplos notables incluyen Venecia, que ha prohibido los grandes cruceros en su laguna; Niza y Cannes, que han prohibido barcos con una capacidad de pasajeros superior a un cierto límite; y ciudades como Barcelona y Dubrovnik, que han implementado límites de atraque diarios.

Por muy convenientes que puedan ser, las plataformas de alquiler vacacional como Airbnb pueden ejercer una presión seria sobre el mercado de la vivienda y contribuir al éxodo de residentes locales de los puntos turísticos.

En respuesta, algunas autoridades están introduciendo prohibiciones.

La ciudad costera andaluza de Málaga ha prohibido nuevas propiedades de alquiler en 43 barrios donde esos alquileres superan el ocho por ciento del parque residencial. La medida se introdujo en enero de 2025 y se probará durante tres años.

A principios de este año, en medio de un ambiente tenso contra los alquileres vacacionales, el gobierno español ordenó a Airbnb retirar más de 65.000 alquileres vacacionales, que según ellos violaban las propias normas y reglamentos de Airbnb.