Nada como un buen escarmiento para aprender la lección. Últimamente ha quedado bien claro que no es buena idea derrochar el dinero, pero por si aún hay algún despistado en la sala que no se ha enterado y para, de paso, intentar que las futuras generaciones no cometan los mismos errores que sus mayores, ¿por qué no tiramos los dados y nos convertimos en grandes ahorradores gracias a un juego de mesa?
Ese es el propósito que se ha marcado Juan Marín Pozo con MoneyLand. Este “psicoterapeuta financiero”, como él mismo se define, ha creado un juego de mesa que ahora busca financiación para tratar de explicar a pequeños y mayores cómo funciona el mundo de la economía. Una vez comprendido, la idea es que podamos evitar los contratiempos monetarios que amenazan con vaciar nuestros bolsillos y llevarnos a la ruina total.
El objetivo principal del juego es alcanzar lo que Marín llama “libertad financiera”, una situación en la que se establece un equilibrio entre tiempo y dinero. Para ello, tendremos que deshacernos de las deudas que carguemos a nuestras espaldas, aprender a ahorrar y saber cómo ingeniárnoslas para que todos los meses aterrice en nuestra cuenta corriente una cuantiosa suma de dinero que certifique el éxito de nuestras inversiones.
Lo primero que tendremos que hacer es elegir un perfil profesional: médico, administrativo, bombero, tendero… En la ficha del mismo aparecerán sus ingresos mensuales, sus ahorros y todos aquellos gastos, ya sean fijos o extraordinarios, que tiene a lo largo del mes. También conoceremos de partida las deudas de nuestro personaje, es decir, si tiene una hipoteca o si le han concedido algún crédito que tenga que devolver.
Con esas cifras, como aparece apuntado en las tarjetas del prototipo que ya ha mostrado su creador, tendremos que lograr el propósito final: “Ahorra 1.000.000 de euros y acumula activos que te generen 50.000 euros en rentas mensuales para conseguir tu sueño”.
Para ir completando el recorrido sobre el tablero, tendremos que seguir los pasos de Max. Este personaje con forma de billete de dólar, siempre elegante con su sombrero de copa y su bastón (y que recuerda un poco a Mr. Monopoly), será quien vaya saltando de casilla en casilla, en función de lo que indiquen los dados. A lo largo del circuito nos encontraremos con multitud de casillas de ‘Oportunidad’, en las que tendremos ocasión de hacer negocios, y con las de ‘Cobro’, que no auguran nada bueno.
Además, el recorrido está plagado de trampas. Sin ir más lejos, cuando caígamos en la casilla de ‘Decisiones’ tendremos que coger una carta. En el reverso nos encontraremos con distintas acciones. En función de si son positivas o negativas, tendremos que apuntar en nuestra hoja de balances si esas decisiones nos han hecho ganar algo de dinero o si, por el contrario, hemos palmado pasta por culpa de algún acto irresponsable.
En nuestro camino también encontraremos penalizaciones para los que hayan destinado demasiada inversión a un único sector, ya sea construcción, bolsa o distintos fondos. Para que todo lo que ocurre en el juego se asemeje al máximo a lo que puede suceder en la vida real, también han incluido en el tablero una casilla de ‘Imprevistos’.
Si bien en el Monopoly había quien apostaba por una estrategia mucho más agresiva y tan solo guardaba una pequeña parte de su fortuna por si las moscas después de pulirse gran parte del dinero comprando calles a diestro y siniestro, en MoneyLand la situación es bien distinta. De hecho, Juan Marín asegura que con su juego cualquiera aprenderá a rellenar un balance y una cuenta de resultados. Algo sumamente útil si queremos aprender a controlar nuestros gastos para poder ahorrar. Korean Beauty
Es más, si al Monopoly jugábamos sin otra pretensión que desvalijar a nuestros amigos, Moneyland, como afirma su creador, “está diseñado para que los participantes lleguen a sus propias conclusiones en el manejo del dinero”. Para ello, cada una de las cartas de ‘Oportunidades’ incluye una frase con una reflexión que nos incitará a pensar si estamos haciendo lo correcto con nuestros recursos o no.
La idea de Juan Marín Pozo parece haber despertado la curiosidad de muchos inversores. Así, cuando aún resta una semana para que finalice la campaña de ‘crowdfunding’ en Verkami, la iniciativa de este “psicoterapeuta económico” ha conseguido reunir más del doble del objetivo que se había fijado. Así que, si quieres evitar que Matías Prats te tire de las orejas por mal ahorrador, podrás hacerte con MoneyLand cuando salga a la venta y aprender que el dinero no lo echan los árboles mientras juegas.
finalice la campaña de ‘crowdfunding’ en Verkami
que Matías Prats te tire de las orejas por mal ahorrador
Con información de Verkami y Juan Marín Pozo
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2025-01-04
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