Internet al poder. La Red ya cuenta con más de tres mil millones de usuarios. Aproximadamente un 40% de la población mundial está conectado, por lo que sus posibilidades de crecimiento son aún extraordinarias, con todo lo que conlleva: oportunidades de negocio por doquier.
más de tres mil millones de usuarios
Los tiempos han cambiado. Si la conexión de banda ancha lleva hasta nuestros ordenadores internet a toda velocidad, lo que rodea a la Red evoluciona más rápido si cabe. Las oportunidades de negocio que supondrán los próximos miles de millones de internautas poco tienen que ver con aquellas que se abrieron cuando, en 1995, los usuarios de la Red suponían menos del 1% de la población mundial.
los usuarios de la Red suponían menos del 1% de la población mundial
Para analizar la situación global de la economía digital, un grupo de investigadores de la Fletcher School, perteneciente a la Tufts University (Boston) ha desarrollado el Índice de Evolución Digital (DEI, por sus siglas en inglés). El objetivo del índice es permitir el estudio en profundidad de la trayectoria digital de los países generando así datos útiles para las empresas, los inversores y los responsables políticos.
un grupo de investigadores de la Fletcher School
Al analizar la demanda, la oferta, el entorno institucional y la innovación de cada uno de los países, el DEI permite situarlos en un ‘ranking’ en función de su evolución digital, y ahí es donde las noticias tienen un sabor agridulce para nuestro país.
Situado en una zona fronteriza entre dos grupos de países – el de aquellos que han alcanzado un alto nivel de evolución en el pasado pero están perdiendo impulso, por una parte, y el de los que tienen las puntuaciones más bajas por otra -, España ocupa un lugar en la mitad de la clasificación creada por estos investigadores.
Ese vigesimoquinto puesto coloca a nuestro país ante numerosos retos. Por una parte, el ecosistema digital español debe aprovechar el alto valor que, tal y como indica el DEI, tienen la oferta y la innovación nacionales para terminar de alcanzar a ese grupo de países – entre los que se encuentran Francia, Holanda o Finlandia – que, aunque han perdido algo de impulso en los últimos años, ya alcanzaron un altísimo nivel de evolución digital.
Por otra parte, inversores, empresarios e instituciones deben trabajar para evitar la caída de la economía digital española a puestos desagradables. Caer a ese grupo con el que linda España según el DEI, y en el que se encuentran países como Portugal, Hungría o Egipto supondría un bache para la economía digital española.
No obstante, la situación debe verse con optimismo, ya que la posibilidad de recuperar posiciones respecto al pasado y volver a estar entre los países con una mayor evolución digital está aún a nuestro alcance. Para ello, es más que probable que los negocios digitales españoles tengan que fijar su mirada en los mercados emergentes, cuyas economías amenazan con superar a las del G-7.
cuyas economías amenazan con superar a las del G-7
Comercio electrónico emergente
Un ejemplo del potencial de los mercados emergentes está en el comercio electrónico y el caso de Rocket Internet. Amazon y Alibaba siguen siendo, a día de hoy, los grandes gigantes del ‘e-commerce’ desde Estados Unidos y China, pero, en 2007, esta empresa alemana que adquirió hace meces la ‘startup’ española La Nevera Roja, se marcó como objetivo ser la plataforma de internet más grande del mundo fuera de la potencia norteamericana y de la asiática.
adquirió hace meces la ‘startup’ española La Nevera Roja
Así, con ‘startups’ como Jumia en África, Namshi en Oriente Medio o Jabong en India, Rocket Internet se lanzó a la batalla por el dominio del comercio electrónico en las economías emergentes.
No en vano, es en esas economías donde surgirán los próximos mil millones de internautas. Aún queda un 60% de habitantes del planeta por conectarse a la Red y ahora los dispositivos móviles permiten ampliar enormemente los horizontes de la economía digital, aunque, eso sí, siempre hay que tener en cuenta que cada país evoluciona digitalmente hablando de una forma distinta, tal y como demuestra el DEI.
En los mercados emergentes o más cerca de nuestras fronteras, a España le quedan miles de millones de internautas a los que atraer para darle un empujoncito a nuestra economía digital que, aunque descolgada de las líderes, aún se sitúa por encima de las de otros muchos países.
Con información de internet live stats, The Fletcher School, Mastercard, Harvard Business Review y El Economista. Las imágenes son propiedad de la NASA y de The Fletcher School
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España se está quedando a la zaga de la revolución digital
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2025-01-14

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